06/05/2013
Por Clarisa Ercolano
La voz de Roberto Díaz traspasa el teléfono
débil, cortada, como si le faltase el aire. Díaz es el referente del barrio qom
Chacra 7 en Castelli, pleno Chaco formoseño y consultado por Plazadem
ayo.com confirma que “el sábado a la tarde,
aplastaron a un niño de 6 años, de la comunidad, que estaba jugando cerca de un
basural clandestino que nos metieron en el barrio cerca de la canchita de los
chicos”. Al lado de Díaz, recién salidos del cementerio local, están Nancy
Galvan y Mariano Gomez, papás del pequeño Carlitos, que ayer murió en el acto
cuando una camioneta que iba a tirar basura, le pasó por encima como si fuese
un perro.
“Se murió enseguida, yo no tengo nada,
tengo 6 hijos más”, es lo único que puede decir la madre. Ella y su marido
viven en una casilla precaria y hace meses esperan la llegada de la asignación
universal por hijo. “Los trámites para nosotros llevan más tiempo”, dice Díaz
con una resignación marcada. Carlitos, nació y vivó casi sin nada; no iba a la
escuela y la muerte lo encontró a unos metros de donde jugaba.
Díaz está indignado, el gobernador Jorge Capitanich
y el intendente de Castelli Alberto Nievas le habían prometido mudar el
basurero, sacarlo de la zona donde viven. La circulación de autos y la
contaminación los preocupaban. “Nos decían que costaba mucha plata”, relata el
referente quien no descarta que la idea sea “cansarnos así nos vamos de acá”.
Ahora, en asamblea, los vecinos decidirán si a
modo preventivo alambrarán la zona para evitar el paso de vehículos que generen
más basura y más muertes. “Ellos solo están pensando en la política, nosotros
somos indios”, dice Díaz quien pese al dolor no quiere dejar de mencionar al
dueño de la Toyota que chocó al pequeño Carlitos ni a su chofer. Son Norberto
Balasec y Basilio Mesa, respectivamente. Según sus dichos, ni miraron y
siguieron de largo.
Ser qom en esa zona, que por un capricho del
destino se denomina Pampa del Infierno, es ser menos que el resto. Así lo
siente Díaz y el resto de los que bien llama hermano. “Fuimos a hacer la
denuncia peor no sabemos si harán algo”, admite.
Luego de la tragedia y de la sepultura de
Carlitos, ni el intendente Nievas ni el gobernador tomaron contacto con los
familiares. Antes, un grupo había viajado hasta Resistencia pero Capitanich, no
los recibió pese a haberles prometido una audiencia.
Hace apenas un mes, Nievas no ahorraba adjetivos
para elogiar en plena Casa Rosada el envío de fondos para realizar obras en su
intendencia: “Esto habla a las claras de la decisión de nuestro
gobernador, como de la Presidenta de la Nación que las obras son para los
pueblos, para la comunidad sin mirar a qué partido político pertenece el
intendente”. Consultados al respecto, Díaz y los vecinos de Chacra 7 aseguran
“todo eso acá no llega”.