9 de agosto de 2012
En el marco del proceso de
desmantelamiento del sistema público de salud, ayer, miércoles 8 de agosto, han
puesto el cerco perimetral dentro del Hospital Borda, para el comienzo de la
construcción del centro cívico que el gobierno de la ciudad viene planificando
desde el año 2008.
A las 4 de la mañana se hizo
presente la policía metropolitana, irrumpiendo en el Hospital desde el fondo
del mismo, rompiendo un candado para poder ingresar junto con los obradores que
instalarían luego el cerco. Asimismo, la policía impidió el paso de los
trabajadores y pacientes al taller protegido número 19, espacio que hasta ahora
era su lugar de trabajo.
Hoy, jueves 9 de agosto, la
situación se vuelve a repetir. A pesar de que ayer debieron retirarse del
predio por pedido de los pacientes, trabajadores y legisladores que se
convocaron en el lugar, hoy se hacen presentes en el Borda tomando la misma
modalidad que ayer. Nuevamente la policía metropolitana rompió el candado de la
puerta que se encuentra en el fondo del Hospital y se encuentra rodeando el
predio. Al tiempo que los trabajadores de la empresa otra vez insisten con
comenzar a hacer los trabajos previos para la posterior construcción del centro
cívico. Es necesario recordar que toda la comunidad del Hospital, tanto como
quienes de distintos ámbitos trabajan en pos del tratamiento o rehabilitación
de las personas que se atienden en los servicios de salud mental, han
demostrado un profundo rechazo por este mega proyecto que irrumpe dentro del
Borda y no tiene nada que ver con el mejoramiento del mismo. Por otro lado, el
servicio 19 consiste en un taller protegido intrahospitalario (es decir,
trabaja con personas que se encuentran internadas dentro del Hospital Borda y
no tienen permiso para salir del mismo) en el que, hasta hace un mes, se
enseñaba el oficio de carpintero a los pacientes, en pos de otorgarles
herramientas de rehabilitación para la posterior reinserción laboral una vez
externados.
El macrismo ha decidido arrasar
sobre la salud pública, y en este caso ha sido la directora de talleres
protegidos, Graciela Russo, quien en vez de ser ejecutora de políticas de
desmanicomialización, ha sido la responsable de llevar a cabo las políticas de
desmantelamiento de lo público propias del macrismo. Desde hace un mes, los pacientes
que trabajaban en el taller protegido nº 19 han visto suspendida su labor por
orden de la directora, sin contemplar los efectos para la continuación del
tratamiento que esto pudiera producir. Y a su vez, ha puesto a disposición a
los trabajadores que enseñaban los oficios, quienes se encuentran ahora sin
saber cómo continúa su situación laboral.
En tanto, el actual interventor
del Hospital Borda y subsecretario de planificación sanitaria de la ciudad,
Néstor Pérez Baliño, afirmó que estos terrenos del Hospital ya habrían sido
cedidos del Ministerio de Salud al Ministerio de Desarrollo Urbano.
Demostrándose en los hechos la intención política del gobierno de la ciudad de
reducir el sistema de salud público. En cuanto a los planes de construcción del
centro cívico, se anunció un presupuesto inicial de 280 millones de pesos, lo
cual resulta insultante entendiendo que actualmente todo el sistema público de
salud se encuentra en estado de emergencia. Se evidencian los intereses
financieros que produciría el enorme proyecto inmobiliario que se está
intentando imponer en el sur de la capital, en detrimento de la transformación
y mejoramiento del sistema de salud.
Repudiamos este proceso de
desmantelación de los espacios de rehabilitación socio-laboral, del cual
también nosotros nos hemos visto afectados a principio de este año. Entendemos
que ataca el derecho de todos quienes necesitan de atención y rehabilitación en
momentos de padecimiento psicológico-psiquiátrico. Y vemos en este accionar,
las políticas de destrucción de lo público con el consecuente reforzamiento del
sector privado, atacando el derecho fundamental de todas las personas de
recibir una atención en salud digna.
En este momento, pacientes y
trabajadores del hospital se encuentran en alerta, convocados en el espacio
afectado para resistir la avanzada. Llamamos a la solidaridad de todos;
estudiantes, organizaciones, profesionales, trabajadores, vecinos, usuarios;
debemos unirnos para defender nuestro derecho a la salud pública y digna.
Defendamos la lucha de los talleres protegidos, un espacio que con arduo
trabajo durante años ha otorgado la posibilidad para que las personas
internadas en el Hospital Borda cuenten con más herramientas laborales en el
momento de externación.
¡Ahora es cuando debemos defender
nuestros hospitales públicos y luchar por políticas reales de
desmanicomialización!
Pan del Borda