Ni flores, ni bombones: el 8 de
marzo es un día de lucha.
No malinterpretemos; a muchas mujeres nos fascinan las flores, la música, la poesía y otras expresiones románticas. Pero el 8 de marzo no es un día para romantizar a la mujer, y menos aún para regalarle flores --al menos que esto se entienda como un acto solidario.
El día internacional de la mujer
NO ES:
Un día para proclamar la belleza de la forma femenina, una excusa para piropear, un día para poner a la mujer sobre un pedestal, elogiar cuan noble, sacrificada, sufrida, etcétera, que era, es y será.Quizás eso último sea lo más tentador ya que apela a nuestro sentido de victimización. Sin embargo, cada uno de los ejemplos mencionados más arriba profundiza la tendencia de objetivizar y deshumanizar a la mujer, cuando el objetivo del día es ser solidarias y solidarios con la lucha de las mujeres en su vida y trabajo en la sociedad y comprometerse con la búsqueda de su liberación y dignificación.
El 8 de marzo sí es un
recordatorio de fechas históricas referidas a las luchas, protestas y matanzas
de mujeres en la lucha por sus derechos. En este día se recuerdan hechos que
recogen hitos a lo largo de los siglos:
La participación femenina durante
la Revolución Francesa en 1789, que
exigía "libertad, igualdad y fraternidad"; La lucha de unas
trabajadoras estadounidenses de la industria textiles por sus pésimas
condiciones de trabajo en 1857, reprimidas por la policía a palos donde muchas
murieron; El primer congreso de la Asociación Internacional de Trabajadores en 1866
que aprobó la participación del trabajo profesional de las mujeres; La
Conferencia de Mujeres contra la Primera Guerra Mundial, de 1899 en los Países
Bajos que definió el carácter antibélico de las
movilizaciones femeninas; Protesta de mujeres obreras en la industria textil de
los EE.UU. que ocuparon una fábrica en Nueva York en 1908. Pidieron un día de
trabajo de 10 horas; (en aquel entonces ellas trabajaban 16 horas diarias). Los
dueños de la fábrica respondieron incendiando la fabrica y quemándolas vivas;
murieron 129 mujeres; Una conferencia Internacional de las Mujeres Socialistas
en 1910 en Copenhague, Dinamarca, en que la alemana Clara Zetkin demandó instituir
el Día Internacional de la Mujer para reclamar los derechos políticos, civiles
y económicos de todas las mujeres en el mundo.
Zetkin propuso el 8 de marzo.
Manifestación masiva de la mujeres rusas en 1917, donde la mujeres precipitaron la revolución, protestando la guerra, "por pan y paz" (el 8 de marzo, el zar fue obligado a renunciar y con el gobierno provisional, las mujeres lograron el derecho al voto).
Cuando romantizamos el Día
Internacional de las Mujeres, minimizamos e ignoramos la lucha de éstas y
muchas otras lideres en la sociedad que tiene más que dos siglos de expresión
en las esferas públicas.
Uno de los primeros textos
conocidos que reconoce los derechos de la mujer como ser humano pleno es la
pequeña obra clásica: "Vindicación de los Derechos de la Mujer" por
Mary Wollstoncraft, del año 1792.
Ella misma fue inspirada por la
revolución francesa, pero llegó a la conclusión que la exclusión de las mujeres
del famoso "libertad, igualdad y fraternidad" no fue casual.
La lucha por la vindicación de
los derechos de las mujeres tiene más que dos siglos de expresión, y sigue
siendo una necesidad en el nuevo milenio. No buscamos culpables; buscamos
caminos de cambio. A su vez, necesitamos más personas, varones y mujeres de
buena voluntad, que se comprometan con esta lucha.
Tambien dentro de las iglesias las mujeres luchan por el reconocimiento de su voz en la defensa y la busqueda de una justicia de genero.Tenemos nada menos que la Palabra de Dios que, desde el primer capitulo de Génesis, proclama que el hombre y la mujer portan la imagen y semejanza de Dios por igual.
También leemos que Dios da
"dominio" --cuidado y mayordomía-- de la creación a los dos sexos por
igual.
El Día Internacional de la Mujer ofrece una plétora de opciones para reconocer y solidarizarse con la temática. Está la IV Huelga de Hambre Internacional:
"Las Mujeres Decimos No a la Guerra ¡Qué se Invierta en Cuidar, No en Matar!", hay peticiones y declaraciones varias en contra a la guerra con Irak, siguiendo una línea histórica de las mujeres movilizándose en contra de las guerras.
En este Día Internacional de las Mujeres comprometámonos a buscar caminos de cambio, orar por la paz, superar la violencia y participar en un movimiento global que busque defender y dignificar a cada persona creada en la imagen y semejanza de Dios.