Hablar desde la
experiencia cotidiana en las Defensorías de Mujeres y Niños del MEDH
- “Yo voy a contar mi experiencia. Me crié en
un hogar con muchos conflictos, mi mamá era alcohólica, mi padre golpeador… y
hay hogares como el que me crié y una trata de colaborar… mas bien que hacen
falta herramientas… . Hoy puedo ayudar desde mi experiencia”.
- “Yo también
he pasado situaciones de violencia en mi niñez pero con el grupo de las chicas
de la defensoría, lo fui sacando todo”.
- “Defender a nuestros hijos de la droga, del dolor,
de la miseria que se están adueñando de ellos,… Y digo nuestro hijos porque
todos los chicos, los jóvenes nos pertenecen a todas, porque cuando vemos
sufrir a una mamá por la pérdida de su hijo, nos toca a todas, nos guste o no”
- “Lo que yo aprendí fue siempre con el grupo,
con otras compañeras, porque sola no puedo, si lo hago con otras es mejor”
“Cuando sabemos lo que le pasa a la compañera, nos juntamos y lo charlamos,… y
cada una pone su idea. Y cuando ya sabemos bien como encaminarnos, la
acompañamos”
- “Los
conflictos los resolvemos las compañeras participantes de las defensorías del
MEDH”
La comprensión, la
trama de amor, el emocionarse juntas, el dolor social, el estudio, el hablar de
la experiencia, construir con otras, son
estrategias que utilizan las mujeres para ir re-construyendo sus vidas con
sentido: “marchando, resistiendo y construyendo”.
Hoy 8 de marzo, como Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos
nos solidarizamos con las mujeres de nuestro pueblo en su lucha; con aquellas
que le hacen frente al sufrimiento de la pobreza, de la esclavitud, de la
violencia, y de la carencia cotidiana al que el sistema capitalista genocida las
somete a ellas y a sus hijos también hoy.